Sube al colorado,
en ese carousel mágico,
que estarás encantada,
siendo la vaquera del amor.
La guapa tapatía
se fue a Puerto Vallarta,
a cabalgar por el mar,
haciendo su sueño realidad.
Qué es cabalgar,
una plena libertad,
descubriendo lo natural,
es una terapia de asombrosa estimulación.
Es la niña de los caballos,
una princesa blanca,
sus ojos reflejan el alma,
el verdadero espíritu de trotar.
El pinto para Elisa,
el azabache para Angélica,
yo me voy con ellas,
a la fiesta de cabalgar.
Si en la playa quieres meditar,
pasea bonito en corcel,
corre por la orilla de la playa,
encuentra la placentera aventura.
Me gustaría andar contigo,
en tu penco blanco,
enséñame a montar,
que juntos nos vamos a iluminar.
Cabalgar es un ejercicio bonito,
un arte verdadero,
muy propio de vaqueras,
para con estilo enamorar.
La conocí montando,
desde su silla disfrutando,
el maravilloso paisaje,
de la vida de exteriores.
Carousel musical,
clásico atemporal,
dotado de fama mundial,
propio para cualquier edad.
Verte en tu percherón,
tan jocosa y bonita,
haz hecho que mi amor estalle,
sigue montando, que me estás inspirando.
Quisiera enamorarte,
princesa amazona,
ser parte de tus días,
y que en pegaso me lleves a pasear.
Ese pura sangre,
colmará la ilusión,
de sentir lo inmenso de galopar,
y una linda vaquera besar.
Arre lucero,
arre mustang,
corre con el viento,
y mi amada en tu lomo.
El carousel sube y baja,
mientras la vida fluye,
el corazón con alegría late,
porque estimula la felicidad.
Quieres montar mi niña,
ánimate y verás,
que dicha encontrarás,
en éstos paseos de lo mejor.
Siempre grato será,
una aventura a horcajadas,
abrazado a tu muchacha,
dirigiendóte hacia nuevos horizontes.
Me gustaría verte montada,
bien aferrada a la rienda,
no te bajes de tu cabalgadura,
que me haces crear poesías rosas.
Sangre de vaquera,
la que Paulina trae,
mirando anocher,
causa amor y gracia.
Yupiiii, yehaaaa!!!,
que venturosa motivación,
es andar al paso,
en el caballo manso
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