¡Sería sensacional!

-Darle un beso apasionado a Angélica Vale.

-Bailar un valz, una polka o un rock con una vaquera guapa.

-Volar al Viejo Continente en un Jumbo 747.

-Bailar en Viena, al ritmo de la música de Strauss, con una princesa real.

-Admirar la grandeza del mar.

-Visitar todos los museos de la Ciudad de México.

-Liberar adrenalina en todas las atracciones de un parque temático.

-Retomar nuestro poder interior.

-Creer que existe la belleza interna.

-Vivir la nostalgia de tiempos de antaño, sin olvidar claro esta la realidad.

-Explotar todas las cosas que son clásicas y atemporal.

-Promover un reencuentro entre compañeros de la preparatoria.

-Reconocer la labor que tienen los médicos y los pilotos en la sociedad.

-Buscar un rinconcito a un lado del mar, y tener un gran romance.

-Encontrar la filosofía de todas las cosas que a diario hacemos.

-Disfrutar del trabajo, que es “La ocupación más bella”.

-Aprender de los mayores, de su experiencia y vivencias.

-Escribir siempre, para clarificar todas nuestras ideas.

-Sonreír y mirar a los ojos de cada persona con la que tratamos todos los días.

-Buscar una hora día para estar con nosotros mismos.

-Alimentar la mente con la lectura, y el cuerpo con ejercicio.

-No olvidar los pequeños detalles, que hacen una vida grande.

-Recordar que lo que crees, creas.

-Tratar de entender las diferentes culturas de cada pueblo.

-¡Vivir la historia, para entender el pasado y comprender el presente.

-Tener un objetivo diario personal.

-Ser acomedidos.

-Vivir cada momento como si fuera el último.

-Pensar que cada quien vale por lo que es, y no por lo que tiene.

-Fomentar los valores humanos, tan perdidos en la actualidad.

-Caminar descalzo por la arena en la playa.

-Realizar por lo menos una hora de relajación y meditación diarias.

-Tomar en cuenta el poder de la música y la escritura que son curativos.

-Amar la belleza de todo lo que nos rodea.

-Cabalgar por la orilla del mar, sintiéndose en libertad y admirando muy de cerca la naturaleza.