Oriundo de Orizaba
en la cálida tierra veracruzana,
la música la llevaba en el alma,
chiflando la manifestaba.
Se interesó por el solfeo
Soplando todos los vientos,
se marchó a la capital,
su pueblo natal no podía enseñarle más.
La composición era su vocación,
Es el Rey de los Cuentos
Pletóricos y de sentimientos,
de amor y ternura,
de armonía pura.
Cri-Cri es un grillito cantor
que se presentó en la XEW,
muy pronto tremendo furor causó,
a los niños ilusionó,
a los adultos transformó.
Unos palomos que se casaron,
canicas que muy alto saltaron,
hasta un ropero de un abuelo coronel
con muchas historias para conmover.
Fue un gran solitario,
pero genio del entusiasmo ,
a nadie pretendía hacer mal,
solamente con sus canciones cultivar
ese niño interno que todos tenemos.
Construyó un mundo ideal,
Lleno de armonía y sinceridad,
La guerra en Europa lo impresiono,
tanto que en la Astronomía se refugió
dejando de lado la creación.
No obstante recapacitó,
comprendió su valiosa aportación,
es el Walt Disney mexicano
hizo maravillas con cuentos y música.
La magia de su mente
hizo entender a las gentes
que la imaginación prende,
fue primordial para Cri-Cri
el espíritu y el alma llenar.
Su deceso fue en el año noventa,
seguro está feliz en las estrellas,
porque el pueblo mexicano no lo ha olvidado,
ya es tiempo de recordarlo.
Cri-Cri jamás fallece,
Continúa siendo un presente,
un entrañable clásico,
un magnífico ejemplo de valores
que nos dicta la verdad,
a la fantasía nos llevará,
pues su composición creativa
es y seguirá siendo para niños grandes,
como lo hemos sido está generación.
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