En Abril de 1998 encontré mi primer trabajo en una agencia de viajes ubicada en Texas 36 .La empresa se dedicaba a la venta de boletaje nacional e internacional por supuesto con la denominación IATA . Además era representante de un grupo de transbordadores que viajaban de Mazatlán a La Paz y viceversa llamado Grupo Sematur de California.
El Gerente de Ventas que se llamaba Florentino me indicó que me iba a dar una oportunidad por 15 días.
En un principio elaboré los estados de venta de los boletos de los barcos en una computadora HP negra , el reporte era bastante elaborado, y los boletos muy detallados. Los transbordadores tenían varias opciones para viajar, camarote, cabina, salón y hasta carga negra, como ellos la llamaban.
Tenía que checar tarjeta cada vez que llegaba ,en una máquina totalmente anticuada que jamás entendí. A veces marcaba un lado y a veces otro, pero igual pudieron contabilizarla como debía ser.
A la hora de la comida casi siempre iba a los tacos con Benjamín ,otras a Vip´s para regresar a las 4 y salir a las 7.
Lo que más volumen de venta le daba era la venta de los boletos de los barcos, que por lo que me di cuenta eran bastante populares.
Muy pronto llegó el “Boletero Estrella”, persona que nunca falta en cualquier agencia de viajes, en esta organización se llamaba Ricardo . Muy pronto me indicó que hiciera unos boletos a mano. Se molestó cuando vio que mi letra no era muy buena.
Tenían el sistema Worlspan, que nunca me permitieron tocar, tampoco se permitía hacer los boletos electrónicos ,cosa que jamás entendí, ellos argumentaron que querían mantenerlo así para ejercitar la letra de los agentes, lo cual se me hizo una ironía.
Un día tuvimos la visita de unos representantes del Grupo Sematur de California, que vinieron a hacer una auditoría de boletos para supervisar que las ventas se realizaran correctamente, encontraron algunas irregularidades . Trabajaron durante 3 días.
Lo que tenía muy bien la agencia era una nutrida cantidad de literatura turística, sobre todo de España. Me volé algunos folletos de éstos y aún los tengo.
Vendí mal un boleto a un cliente, pero no fue mi culpa, pues no me explicaron mal cual era el procedimiento a seguir, lo estaba mandando con la carga negra, luego de estos todos me miraron como si hubiera cometido el peor de los crímenes.
Tiempo después entró una niña que no tenía la más mínima idea de los que el turismo y los viajes. Coincidió con que entró un nuevo gerente general y era su recomendada.
Regresé al principio, a repartir curriculums en hoteles, líneas aéreas ,centrales de reservaciones ,etc, hasta que en Turismo Marben alguien me dio la oportunidad un mes después.
Cuando estaba clasificando los boletos de los barcos me los revolvieron y me echaron la culpa a mí.
La gota que derramó el vaso ocurrió cuando por error le pasé una llamada a Florentino, quien no vaciló en despedirme dos días después argumentado que me faltaba mucho para conocer lo que era la venta en una agencia de viajes , en lugar de ayudarme me quitó.
Me pagaron 560 pesos de este trabajo que me duró nada más 15 días , lo atribuyo a que ellos no me tuvieron “La Paciencia necesaria” ,como dice el Chavo del 8 para explicarme bien el funcionamiento de las ventas y boletos.
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