Ser
niño,
es
vivir la realidad,
sin
importar el que dirán,
es
una experimentación de todo.
Ser
niño,
es
siempre jugar,
llenar
el espíritu de ilusión,
y
el alma de lindos motivos.
Ser
niño,
es
olvidar los miedos,
concentrarse
en los deseos,
imaginar
una enorme magia.
Ser
niño,
es
no complicarse la existencia,
vivir
los días con integridad,
reírse
y ser travieso.
Ser
niño,
es
empaparse con el agua de la claridad,
reírse
de uno mismo,
ser
aventurero al natural.
Ser
niño,
es
desentenderse de las preocupaciones,
vivir
de auténticas emociones,
sin
tomar en cuenta el tiempo.
Ser
niño,
es
querer conocer,
mil
ideas tener,
ser
muy auténtico,
correr
en pos de algo nuevo.
Ser
niño,
es
desnudar el alma,
dar
rienda suelta a la creatividad,
dejarse
llevar por la capacidad de asombro.
Ser
niño,
es
hacer de la curiosidad,
la
filosofía diaria,
ser
maestro de la belleza,
y
alumno del amor.
Ser
niño,
es
no resistir la tentación,
satisfacer
el ego,
con
nuestra propia admiración.
Ser
niño,
es
caerse, llorar, serenarse,
volverlo
a intentar,
sabiendo
que querer es poder.
Ser
niño,
es
mantener esa blancura,
esa
férrea inociencia,
que
comforta al corazón.
Ser
niño,
es
estar activo,
buscando
objetos,
al
futuro no temer.
Ser
niño,
es
vivir en el presente,
plantarse
firme en el aquí y el ahora,
todos
los momentos disfrutar.
Ser
niño,
es
correr con alegría a los encuentros,
conservar
ciertos secretos,
los
muñecos de peluche abrazar.
Ser
niño,
es
un estado mental,
que
nos aleja de cualquier perturbación,
nos
induce a una linda estimulación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario