Primer día, 02 de Septiembre, 1985:
La Primaria había quedado atrás. Vivíamos el primer día de
nuestra Educación Secundaria. Cuando estábamos listos en la fila para entrar al
salón, Rubén comentó: No les da miedo entrar a la secundaria… Todos estuvimos
de acuerdo.
Aquel día no tuvo nada de especial. Tomamos nuestras clases
normales y conocimos a los distintos maestros que nos impartirían su cátedra.
Bárbara era ya la Directora Académica, traía muy cortito a
todo el mundo. Nadie se salvaba de sus regaños.
Siendo las 11.15 se presentó Beatriz, la encargada de
impartir Algebra, quien por cierto era de Córdoba, la primera lección fue la
reducción de términos algebraicos, una cosa sencilla, sólo sumar y restar, pero
después se fue complicando, pero mi fue un verdadero infierno.
En la tarde, después de habernos proporcionado la lista de
libros nos dedicamos a recorrer todas las librerías de Satélite, los
encontramos todos y Benjamín me ayudó a forrarlos.
Durante la secundaria acostumbraba llevar mis apuntes en una
carpeta con separadores para las diferentes materias. Mi papá me dijo que para
proteger las hojas usara reforzadores y
eso me funcionó muy bien.
Recuerdo muy bien mis libros, geografía, química, biología,
física, etc. Todos quedaron muy bien forrados.
La hermosa Angeles
A pesar de ser reservado y tímido fue popular entre las
muchachas, entre ellas se encontraba una chaparrita y morena llamada María de
los Angeles.
Desde mi
punto de vista era la chava más guapa que había visto, después de Alejandra
Amador por supuesto, y de Elisa, la que me enseñó a mirar a los ojos el 17 de
abril de ese mismo año.
Angeles me cautivó desde el principio. Nos miramos muchas
veces desde nuestros respectivos lugares, pero ninguno de los dos se atrevía a
hacer algo más formal.
Yo le regalaba dulces de menta, y ella tan sólo me los
agradecía con sonrisas, sin embargo, tenían más valor para mi que decirle miles
de palabras.
Al igual que las niñas de la Primaria, Angeles gozo de una
gran popularidad entre nosotros.
Ella fue una de mis inspiraciones para salir adelante y mi
gran amiga. Me defendía cuando me
molestaban y me pasaba los resultados de las tareas de Algebra.
Cuando intercedía por mi, lo hacía en sociedad con otras tres
compañeras: Yadira, Adriana e Inna.
Además, cada vez que realizábamos trabajos en equipo, y yo
quedaba fuera , ella me acogía en el suyo. Entonces estaba bendito entre las
mujeres.
Fueron muy gratas las experiencias con Angeles, es parte de
una fabulosa amistad en mi existencia. Fue de las primeras personas que me hizo
saber que valía mucho.
Jueves, 19 de Septiembre: Un
terremoto nos castiga
Alejandro y yo llegamos temprano al escuela. No faltaba quien
pidiera que le pasaramos la tarea. Estabamos todos en el salón. Dieron las 7.19
hrs, un movimiento extraño se sintió en el suelo y empezó a sacudir las instalaciones de la
escuela. Salimos corriendo al patio para darnos cuenta de que todo afuera
seguía tambaleándose: Postes, cables de luz, anuncios , comerciales, etc.
Esto duro cerca de 2 minutos. A las 7.30 se inició la primera
clase. Tiempo después escuchamos sirenas de ambulancias y patrullas, helicópteros
recorriendo toda la ciudad.
Un terrible terremoto había sacudido a la metrópoli entera.
Cerca de las 11.30 Emilio anunció que
los alumnos de la Prepa irían a la Cruz Roja ayudar en las labores de rescate.
Las llamadas de nuestros padres comenzaron a fluir diciendo que en casa todo
estaba bien.
Salimos temprano, y permanecimos todo el día en nuestros
hogares esperando recibir más noticias trágicas sobre esta gran masacre que
terminó con varios edificios antiguos de la capital.
Los tres días siguientes se suspendieron las clases para
realizar procedimientos de seguridad hasta que todo regresó a la normalidad.
Vaya manera de empezar la secundaria…. , con una tragedia,
esa fue una experiencia muy traumática para mi, que gracias a Dios no se ha vuelto a repetir. En ésos momentos
pensé lo peor y me costó mucho trabajo asimilarlo.
Desde entonces la SEP ha organizado en todas las escuelas los
famosos simulacros. Hoy en día me parece que ya tenemos conciencia de que vivimos
en una alta zona sísmica, y la alerta que previene un temblor ha funcionado
bien.
El sufrimiento de Mecanografía
Una de las materias con las que más sufrí además de
Matemáticas fue Mecanografía. Compramos muchas máquinas, desde Olivetti hasta
Remigton , unas se estropearon, y otras más sufrieron pernaces. Lo cierto es
que fue lo mismo . A mi para nada me funcionó eso de escribir con el teclado
cubierto, aunque me aprendiera de memoria donde estaban las letras. Nunca me
salió bien. Los trabajos me salían chuecos, con la hoja pasaba lo mismo , y que
decir de cuando se acaba la cinta… era todo un ritual cambiarla!!!, y un poco
más si se te erredaba . No podía faltar la ayuda siempre desinteresada de
Manuel Rivera, Rubén e Ivonne.
Finalmente me permitieron trabajar sin cubrir el teclado. Aún
así pase muy malos momentos durante las horas de clase. Nunca la reprobé
gracias a la atenta y cariñosa atención de mis amigos.
Fánaticos del Fútbol
No faltaba que en los recreos durante los tres años de la
Enseñanza dejaran de jugar cascaritas en el patio… eran unos verdaderos
fanáticos!!!, no paraban!!!. Yo no destacaba aquí. Era solamente espectador, me
sentaba solo en una banca y de vez en cuando me tocaba uno que otro balonazo.
Emilio organizaba campeonatos de balompié en el colegio. El
también le entraba. Cuando esto se celebraba se suspendían las clases para
apoyar a nuestro equipo.
El que ganaba, hacia toda una fiesta. Hasta premio le tocaba.
Dibujo libre
El dibujo fue algo que nunca se me dio. Eso lo sabíamos desde
hace mucho , por lo que en esta asignatura solamente me limite a hacer los
palos, rayas y figuras geómetricas que se nos pedían. Gelens fue nuestra primera maestra de dibujo.
El cuaderno para hacer las láminas era algo especial. Esta
tampoco la reprobé, pero jamás pasé de 6
o 7.
Otra profesora que tuvimos nos dejaba hacer láminas libres,
yo dibujaba frecuentemente equipos de sonido o coches que Jorge Berriel me
enseñó a hacer, que tampoco pasaron de 7 . Un día hasta gané un concurso que
hicieron. Dibuje un avión , pero sólo fue por el cariño que me tenían mis
compañeros, por lo tanto lo acepté. Me dieron como premio unas golosinas.
Continuará...
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