La Sultana del Norte le dio
la luz
A este ser de carismática
sencillez,
sus bolitas de algodón
hicieron revolución,
porque en el Payasito de la
Tele se convirtió.
Siendo dentista de profesión
Pronto su carrera se transformó
Cuando Televisa lo llamó.
Es un cómico fino,
A nadie ha molestado,
Con su música ha alegrado,
con sus consejos
transformado
a toda nuestra generación.
Pillín venía a darle lata
cuando de la maleta lo
sacaba,
tuvo un programa para
entretener,
buscando asimismo conmover,
cantaba, pintaba y vacilaba,
todo el mundo lo adoraba,
en ocasiones hasta bromeaba,
pero siempre con buenas
intenciones.
Maestro del arte infantil ,
Un genio para divertir,
Con Chabelo trabo amistad,
Juntos grandes éxitos cosecharon,
divos de niños y niñas
a México dieron grandeza.
Un bufón auténtico,
Con estilo propio y sin
imitaciones,
un profesional de la
farándula
que a todos nos enloqueció.
Más de pronto desapareció,
su paradero se perdió,
pero los mexicanos no lo hemos
olvidado
porque es una figura clásica
que llena espacios
con su histrionismo y
encanto.
Reside en su natal
Monterrey,
Esperando volver al
estrellato,
a cantar, aconsejar y
vacilar
a este país lleno de
fantásticos talentos.
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