El
arte de escribir
suele
ser persuasivo,
con
un estilo sencillo
pretende
al mundo revolucionar.
El
arte de cantar
pretende
animar,
reformar
la vida
con
mensajes de paz y armonía.
El
arte musical
es
un bien para el espíritu,
un
bálsamo para el alma,
capaz
de transformar
el
pensar y el actuar.
El
arte de la historia,
actuación
grandiosa del ayer,
capaz
de revivirse leyendo,
gran
creadora de héroes y malvados.
El
arte de soñar
revela
intenciones,
al
tiempo que crea ilusiones
que
se viven a la media noche.
El
arte de Walt Disney
es
universal,
nadie
lo puede desbancar,
pletórico
de fama mundial.
El
arte de Star Wars,
una
filosofía real,
sabiduría
de mil galaxias
con
la fuerza como enseñanza.
El
arte de la inspiración
fluye
cual rio caudaloso,
cual
mar embravecido
por
los géneros literarios
y
las bellezas del orbe.
El
arte de Elisa
es
saber mirar bonito,
y
abrir el alma
hacia
su verdadero interior.
El
arte de la aviación
es
poesía que vuela,
que
se eleva en crónica,
que
aterriza en cuento.
El
arte que embelesa
se
llama Venecia,
también
Viena,
Roma,
Madrid, Escocia.
El
arte de leer
es
poder total,
en
alas de la información
las
cosas posibles serán.
El
arte del carousel
a
la vida imprime filosofía,
un
sube y baja incesante
apto
para todas las edades.
El
arte de cabalgar
es
preciosamente espiritual,
un
galope armónico
por
las sendas del existir.
El
arte de una vaquera
es
andar la felicidad,
sobre
corcel de gran fogosidad
como
princesa alada.
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