Hay algo común en todos los que pertenecemos a las familias Piedras y Ania. La gran mayoría ha tenido problemas con los huesos y articulaciones principalmente en la espalda , las piernas y los hombros. Mi tía Irma rodó por la escalera de la casa de mis abuelos en uno de sus arranques de furia cuando era niña, y se le luxó el hombro . Mi abuela recuerda que la lesión le llegaba hasta el antebrazo.
Por su parte mi abuela Lita ha sufrido varias caídas, lo mismo que mi mamá, mi abuela Lupita también tuvo dificultades en la cadera y las vértebras.
A me tocó entrar al quirófano hace 4 años para corregir una luxación reincidente, que se transformó en un procedimiento mayor al descubrir cuán dañado estaba mi hombro.
En 1996, mi Tía Irma tuvo que intervenida del mismo mal que yo, su operación tan solo duro 2 horas y fue efectuada por el eminente Javier Parroquín, un verdadero genio de la microcirugía y la ortopedia . Su operación estuvo menos complicada que la mía , según nos dice tuvo mucho dolor después de regresar de la anestesia , cosa que no pasó conmigo ,con todo y la complicación de la cirugía.
Mi papá, que nunca antes en su vida había pisado un quirófano , se vio en la necesidad de tener que vivir esta experiencia, en Octubre de 2000, se resbaló en el patio y se lesionó la mano , Parroquín le colocó unos tornillos que apretaba con regularidad, hasta que pudo recuperar toda la movilidad, la cirugía fue de corta estancia ,Mi padre sufrió al igual que yo con los ejercicios de Lucero, pero a él le tocó más duro, pues la mano es más difícil de rehabilitar que el hombro.
Recientemente, mi Tía fina también se cayó y se luxó y fracturó el húmero , fue intervenida en Médica Sur , fue una cirugía bastante más complicada que las nuestras,la terapia que llevará será mucho más dolorosa según nos hemos enterado, con esto confirmamos que en esta familia somos muy propensos a tener este tipo de problemas, lo mismo ocurre con las migrañas ,que se han reducido significativamente en el último año, pues dicen los expertos que conforme vas creciendo van disminuyendo.
Toda esta serie de eventos médicos nos han llevado a conocer a una variedad de especialistas este ramo de la medicina como el Dr. Peón Vidales, el Dr. Servando Lozano el Dr. Javier Parroquín y la Terapista Física Lucero Elizarras.
Mi primo Reynaldo tuvó un problema en las piernas en 1987 y en un procedimiento sumamente especializado le tronaron 4 huesos en el Hospital Angeles del Pedregal. Se recuperó pronto. Recuerdo haber visto las radiografias que se tomaron durante la cirugía y se veían muy impresionantes.
Todos hemos aprendido lo frágil que son los huesos y músculos del sistema óseo y a la vez hemos sido testigos de los grandes avances en el tratamiento de este tipo de afecciones , y la lucha y valentía del personal médico.
Nos ha quedado la cicatriz a todos aquellos que hemos sido operados, y por lo tanto, debemos cuidarnos y hacer ejercicio cada vez que el tiempo es extremoso y frío para mantener en buen funcionamiento esta maravillosa parte del cuerpo humano.
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