Anécdotas de mi vida 2

1-.Mari Mar Romera: Maestra literaria, espiritual y académica que en el bachillerato nos impartió Taller de Lectura y Redacción. Su mayor legado fue haberme dicho: Tu te ganas a la gente.


2-.Elisa: Niña mágica, la Princesa de La Vista que me enseñó a mirar a los ojos  el 17 de abril de 1985 en una esquina histórica del celebre Instituto de Educación Personalizada ubicado en San Luis Potosí 123 Colonia Roma Sur. Me enamoró profundamente  el 28 de noviembre de 1984 , día en que la conocí. Se ha convertido en mi "Chica Vintage ochentera", además cabalga en mis sueños  en un caballo lucero, ágil y ligero. Anhelo su reencuentro.


3-.1987: Un año muy recordado por la serie de fiestas y tardeadas a las que asistía con mis primos los Becker Ania. Saqué a bailar a mi primera niña, tremendo susto nos llevamos en Thiers, miles de conciertos en el Colegio Vallarta, un viaje a Córdoba  donde me cautivó Erika, una amiga de la prima Loli  y dos grandes fiestas de XV años de las primas Ileana e Irma.


4-.Dr.Eduardo Perrusquía Ortega: Médico considerado como "El mejor neurólogo de México". Me estuvó tratando entre los años 1980-84  con evaluaciones continuas  y electroencefalogramas en un aparato Beckman negro. En el sexto piso de Medellín 43, donde se ubicaba la Unidad Neurólogica, empresa de la que era director médico, me practicaron exámenes psicológicos  a cargo de Tere Vale, tía de Angélica.


5-.Cecilia Perrusquía: Hija del afamado neurólogo. A ella yo le gustaba , compañera de mis terapias con Trini. Su mejor atractivo fue ser tímida, pero le encantaba que la acariciara, y era igual que yo amante de los muñecos de peluche.


6-.Heriberto Zavala: Mi jefe en PF Changs Lomas Verdes. Líder enérgico y audaz que una vez nos dijo que quería ser actor. Nos hacía reír con ganas en cada una de sus intervenciones. En septiembre del 2016 lo mandaron a la gerencia general de la tienda Parque Delta, que abrió sus puertas en octubre pasado


7-. 1988: Lo considero un año mágico , en virtud de que el 10 de abril me enamoré de Angélica Vale a sus 12 años de edad. Actuaba en el teatro en la obra "Una Estrella", junto a su mamá y Claudio Brook  haciendo el papel de Susy, quien soñaba con hacer teatro. Mi abuelo Ramón me regaló el Lp de la producción. Angie cantó magistralmente  Que es el amor, un tema de Pocho Pérez. Desde ese entonces  es mi amor platónico más grande.


8-.Lili Ledy:  La marca de juguetes mexicana  más exitosa  de los años 70 y mediados de los 80. Desafortunadamente cerró sus puertas en 1985 dejandónos una agradable cantidad de recuerdos. Todos añoramos su lema: Es Lili Ledy.... Tuvó una grandiosa y genial línea de juguetes y muñecas, además de haber tenido el permiso para fabricar los productos de Star Wars.


9-.Burago: Una bonita colección de autos clasicos a escala de los cuales tuve muchos, y que causaron aprietos al traerlos de EUA, pues no había desarmador para remover el tornillo de seguridad que traían.


10-.Elda: Otra niña mágica, así la he definido, mi fisioterapista estrella cuando me luxé el hombro izquierdo en el 2007. Tuvó gran encanto  y me pasó como aquella canción de los Tres Caballeros, fue un "Embrujo", ya no quería que las terapías terminaran  por lo agradable de su compañía. Mi segundo tesoro después de Elisa, alguien que se queda en el alma, y ninguna sacudida la elimina. Estudió en el Kipling con Ricardo y Geraldine.


11-.17 de abril, 1985:  El día más glorioso de mi vida, pues una niña entre rubia y morena, abrió mi alma con su mirada enseñándome a mirar a los ojos. Los bellos oclayos verdes de esa princesa llamada Elisa han dando luz y determinación a mi espíritu  de 1985 a la fecha. Los actos ocurrieron en el Instituto de Educación Personalizada, una preciosa casa de los años 50´s. Algún día me gustaría visitar esa residencia para revivir estos acontecimientos.


12.Algebra de Baldor: El peor libro que en mi existencia haya conocido. Me provocó tormentos, regaños, reprobatorios y confusiones. Cada ejercicio de este maldito texto resultaba en un "gran chorizo de letras, números, coeficientes, binomios y ecuaciones poco entendibles para mi mente de escritor, y solamente Rosibel e Ivonne sabían explicarlo con maestría.