Nostalgia de los cincuenta
esos bellos cadillacs,
donde se llevaba
la música del rock and roll,
la televisión llegó
y en un aparato de gran dimensión
a todos los mexicanos conquistó.
Nostalgia de los sesenta
Presidente Kennedy,
Tu férreo liderazgo
Todas las almas del mundo ilumino,
y los jóvenes se rebelaron
contra gobiernos mal encarados,
que en lugar de diálogo
respondieron con mortales balas.
Nostalgia setentera
la que esta generación vio nacer,
con Lili Ledy jugamos,
música disco bailamos,
la Guerra de las Galaxias
filosófica fuerza nos dio.
Nostalgia ochentera
forjadora de la informática,
primeros enamoramientos llegaron
llenos de clásicas verdades
con las que aprendimos la auténtica fuerza del alma.
Nostalgia noventera
Internet al mundo impactó,
todas las barreras rompió,
por fin nos graduamos,
dejando valiosos cariños en el alma mater,
nos titulamos,
y los malos vaticinos
nuestra voluntad aniquiló.
Nostalgia de los cuarenta
tiempos de confragación
de armisticios dolorosos,
que tuvieron que cesar
bajo fuegos atómicos,
y un gran muro
para evitar provocaciones futuras.
Nostalgia aérea
Pan American incluida,
Branniff se quedó en el corazón,
con sus coloridos pájaros de acero,
a la CMA no volveremos a ver
a los cielos elevarse.
Nostalgia de Elisa,
y de otras emocionantes chicas
compañeras de terapias
de primaria y secundaria
y mágicos bachilleratos.
Nostalgia de ojos
Que bajo vestido blanco
Supieron mirar bonito
Para enseñar
Las grandezas del alma.
Nostalgia de Veracruz
Fiestas en el Casino Naval,
noches viejas de entrañables bailes
con su simpático viejito
alma de la fiesta.
Y la nostalgia así es…
mil lágrimas suelen llover,
el llanto de lo añorado
hará acto de presencia,
el que una persona ya no este,
no significa que ya no éste con nosotros.
Nostalgia que nos invades,
llénanos de candor,
y aunque no vuelvas más,
ilumina nuestro aquí y ahora.
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